Un ser complaciente
- Camila
- 7 ene 2019
- 2 Min. de lectura
Estoy encerrada en mi cuarto llorando por todo y por nada en específico. Llevo ya varios días obligándome a sonreír, a comer, a aparentar que todo va bien y que soy feliz cuando no es así. Me avergüenza estar en esta situación tan auto destructiva y confusa, porque al ver mi perfil de instagram parece ser que todo es fácil en la recuperación. Pero no es así y desnudarme sentimentalmente me es difícil, aunque hay algo en mí que me dice que debo hacerlo para enseñarles a las persona que me siguen que no todo lo que se ve en las redes es real y que no son las únicas que lloran todos los días, aparentemente sin razón.

Hace unas semanas cuando otra vez veía lo malo de mí frente al espejo, no le di importancia. Poco a poco me fue cegando de mis cualidades, hasta llegar solo a ver mis defectos. En ese momento temí de esta crisis, pero seguía haciéndome la fuerte con un solo objetivo: Complacer a mi familia. Quienes constantemente me presionan por una recuperación impecable, sin bajones, sin miedo, sin errores y sin retrasos.
Ahora que lo pienso soy una persona muy complaciente. Pongo en riesgo mi salud mental con tal de hacerles creer a mi familia que soy perfecta y que deben estar orgullosos de mí. Esto porque desde pequeña tengo mucho miedo de defraudarlos.
Me encierro en mi cuarto a llorar y esperar que mis ataques de ansiedad terminen porque no quiero que se enteren que la depresión y ansiedad me están afectando de nuevo y que la voz del trastorno cada día es un poco más fuerte. Me dedico a mis estudios hasta parecer ermitaña con el fin de obtener buenas calificaciones (que para mí nunca son suficientemente buenas) y así poder verlos felices por mí. Incluso no me permito restringir y bajar de peso para no verlos sufrir como en el 2016 y no por mi propia salud física.
Esto es algo que debo cambiar de mí. Debo ponerme a mi siempre de primero, mi armonía, mi felicidad, mi integridad y mi salud, porque soy la única que estará hasta el final de mi vida a mi lado. Complacer a los demás es doloroso porque dejas a un lado lo que tú alma pide y al hacer eso dejas de vivir, para comenzar sólo a existir.
Comments