Tu cuerpo fue hecho para mucho más que estar fit
- Camila
- 23 feb 2020
- 2 Min. de lectura
Vas por la calle comparando tu cuerpo con el de otras personas, pasas el tiempo viendo fotos en instagram que te hace sentir mal con tu cuerpo, buscando ejercicios o dietas que logren cambiar tu composición corporal, vas por la vida eligiendo ropa que oculte tus inseguridades corporales y huyendo del espejo porque el reflejo de tu cuerpo te avergüenza.
Constantemente te reprochas por no tener esos abs marcados, por no tener esas piernas y brazos delgados, por no tener esos collarbones prominentes y por tener esos cachetes rellenitos. Estar fit es un bomba que explotó por todo el mundo, las redes sociales están llenas de ideales de belleza y los anuncios publicitarios de los gyms nos bombardean a diario. Te es bastante frustrante no tener un cuerpo fit que refleje “salud” porque te han hecho creer que estar muy delgada o ser una persona de talla grande es malo y que a nadie le gusta ese aspecto “enfermo”. Incluso a veces estar bien con tu cuerpo aunque este no esté tonificado es mal visto porque lo ven como conformismo y tu crees que no mereces amarlo si no cumple con esa lista de ideales, pero realmente lo que no mereces es ser tan dura contigo misma, ser tan poca compasiva con tu cuerpo y ponerlo en peligro con tal de cambiarlo.
Te enfocas tanto en las inseguridades que otras personas te han creado respecto a tu cuerpo, que olvidas lo mucho que hace por ti todos los días sin que te des cuenta (digestión, reparación celular, transporte de sangre, absorción de nutrientes, etc), lo lo maravilloso y noble que es porque a pesar de que no recibir amor de tu parte hace cualquier cosa por mantenerte viva y no pierde la esperanza de que algún día te reconcilies con él y lo trates como una madre cuidaría a su hijo. Olvidas principalmente que gracias a tu cuerpo puedes lograr todas tus metas, que es quien te lleva y te trae a lo largo de toda tu vida, que es irremplazable y que sin él no estuvieras aquí.
Tu cuerpo no es solo ese “Bikini Body”, es también esas manos que te permite escribir, dibujar, pintar, cocinar o crear cualquier cosa; es esos brazos que te permiten abrazar a las personas que amas; es esos ojos que te permite leer, ver películas, ver fotos de momentos inolvidables y reconocer la cara de tu familia y amigos; es esos pies que te permiten caminar, hacer yoga o ejercicio; es esas piernas con las que saltabas, corrías y jugabas todo el día durante tu infancia; es ese abdomen que protege tus órganos vitales; es ese útero que te permite darle vida a otro ser; es esa nariz que te permite olfatear e incluso regresar en el tiempo a causa de un olor peculiar; es esos oídos con los que puedes escuchar tu música favorita; es ese corazón que bombea sangre por todo tu cuerpo para estar viva; es esa columna que sostiene todo tu cuerpo para que puedas vivir momentos inolvidables o hacer tus actividades diarias. En fin, tu cuerpo es mucho más que un cuerpo fit, fue hecho para hacer cosas mucho más importantes que entrar en un estándar de belleza.

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