Dejaré de sobrevivir para comenzar a vivir

Durante los últimos años he sobrevivido a los días, ya sea física, emocional o psicológicamente. A veces despertaba deseando que el día terminara y otras veces despertaba con los ánimos para hacer del día algo increíble, pero algo pasaba y todo se me venía abajo provocando en mí el deseo de que el día llegara a su fin.

Podía tener un evento importante, pero mi salud no me permitía vivirlo al máximo. Si mi salud física era la que no me permitía disfrutarlo, era algo no tan malo porque al tomar alguna pastilla o comer algo, me aliviaba un poco y me sentía con más energía para hacer las actividades necesarias. Pero lo jodido era si mi salud mental era la que no me permitía vivir el momento al máximo porque comenzaba a luchar contra mí misma. Sentía como millones de ideas giraban alrededor de mi mente, unas ideas incluso contradecían otras ideas. Eran tantos pensamientos que me aturdía, me frustraba conmigo y me ponía de mal humor por el resto de día.

Me había acostumbrado tanto a esta forma de "vida" que no me había dado cuenta que ya no estaba viviendo, sino sobreviviendo. Había perdido la alegría, la energía, todo tipo de motivación para hacer cosas tan simples como levantarme de la cama o ver netflix, las ganas de realizar cosas que me gustan como escribir, hacer yoga, cocinar o salir con mi familia y amigas. Pero principalmente había dejado de amarme y conocerme a mí misma, y si uno no se ama o conoce, los demás esta arruinado.

No me dí cuenta de esto de la noche a la mañana. Veía como mis amigas se divertían, gozaban de la etapa por la cual estamos pasando y reían con ganas. Mientra yo veía todo negativamente, me aislaba, no me daban ganas de salir con ellas, nada me causaba gracias y aunque estuviera con ellas físicamente, mi mente estaba en otro lado. Lo mismo me pasaba con mi familia.

Fui a talleres de amor propio, anti depresión y grupos de imagen corporal positiva. Esto sumado a los vídeos que veía en youtube, algunos comentarios o mensajes que recibí de personas y las experiencias que obtenía cuando disfrutaba un momento del día, me hicieron ver que estaba desperdiciando mi vida y dejando de valorar todo lo bueno que tengo y/o he logrado.

Un día de estos, no recuerdo cuándo exactamente. Dije "¡Basta!", no quiero que los años sigan pasando y yo continúe hundida en esto. Quiero luchar por recuperar mi vida, salud integral y conocerme de nuevo. Es una batalla contra y por mí al mismo tiempo, pero estoy segura que vale la pena porque comenzaré a vivir como la hacía de pequeña.

No es algo fácil. Es un recorrido con subidas y bajadas, en donde te enfrentas con monstruos únicamente visibles para ti, tienes un mix de emociones e ideas que a veces no sabes cómo expresar, miedo, esperanza, cansancio, en ocasiones te sientes apoyado y en ocasiones solo, incomprendido.

Mi mantra en este camino es, siempre vivir cada momento, ya sea positivo o negativo. Si es positivo me dará felicidad, satisfacción y buenos recuerdos. Si es "negativo" me dará experiencia, me hará más fuerte y me hará valorar más los buenos momentos.